MANUAL BÁSICO PARA ADOPTANTES DE GATOS
(Versión resumida del manual completo. Autoría original Laura Trillo Carmona de Terapia Felina. Resumido por ADAS)
1. LA ELECCIÓN DEL GATO
¡Enhorabuena! Has elegido tener un maravilloso compañero que te dará muchas alegrías y experiencias increíbles a lo largo de vuestra vida.
La decisión entre todos
La decisión de tener un animal debe ser aceptada por todas las personas que viven en el hogar que compartirá el gato, para que sea como un miembro más de la familia y todos colaboren en sus cuidados y atenciones.
Ten en cuenta que un gato puede vivir hasta 20 años, en los que vuestra vida va a cambiar mucho, pero el gato siempre estará con vosotros pase lo que pase, tenéis que ser responsables y consecuentes y tenerlo siempre con vosotros.
Lo mejor de todo es que junto a él aprenderás mucho sobre ti mismo/a y tu vida diaria estará siempre acompañada de un amigo muy fiel.
Lo más importante a la hora de elegir
Los gatos de cualquier edad se adaptan igual de bien a tu hogar. Los gatitos pequeños son irresistibles pero piensa que el primer año suelen ser pequeños terremotos imparables que requieren de mucho juego y personas con experiencia para enseñarles por ejemplo a no morder ni arañarnos. Es ideal si te llevas uno pequeño, llevarte mejor dos, porque así ambos aprenden y juegan juntos, además serán inseparables para toda la vida.
El carácter del gato no depende del sexo que sea ni de razas, cada uno tiene su propio carácter, gustos y peculiaridades, al igual que nosotros, cada gato es un mundo.
Carácter
Esto es lo más importante que tenemos que mirar a la hora de elegir a nuestro futuro gato. Tenemos que pensar cómo nos imaginamos a nuestro futuro gato y sobre eso basar nuestra elección. Es muy importante que el carácter y necesidades del gato se adapten bien a nosotros y al tipo de entorno que le podemos ofrecer.
Las personas que trabajan en la protectora y las casas de acogida que los cuidan los conocen mejor, coméntales tus necesidades y déjate asesorar.
2. LA LLEGADA A CASA. ¿QUÉ HAGO?
Debemos tener en cuenta varias cosas:
-Los gatos son territoriales, por eso les cuesta aceptar otro animal nuevo y hay que hacer las presentaciones progresivas.
-Los gatos son carnívoros cazadores, por eso su comida debería estar puesta a su disposición todo el día.
-Necesitan marcar su territorio a diario, por eso necesitan ciertos elementos como los rascadores.
-Son animales nocturnos, por eso a veces los gatos se muestran más activos de noche.
-Suelen dividir su territorio en varias zonas.
-Son sedentarios, por eso les cuesta adaptarse a un nuevo entorno y a los cambios.
-Son rutinarios.
El gato necesita un "lugar seguro"
Los gatos van dejando diariamente sus feromonas tanto en casa como en nosotros y en los otros animales que viven con ellos mediante roces. Esto tranquiliza y relaja al gato, puesto que le ayuda a identificar su entorno como su propio territorio.
Al llegar un gato a casa por primera vez sea de la edad que sea, debemos acomodarlo en una única habitación con la puerta cerrada. Para el gato será mucho más fácil adaptarse. Colocaremos todos los elementos imprescindibles en una habitación poco ruidosa y tranquila, colocando el arenero en una punta y la comida y el agua lejos. Sus juguetes y lugares de descanso o rascadores también deben estar en esta habitación. Tras unos días, el gato se habrá adaptado a este lugar. Le abriremos la puerta y le dejaremos salir a explorar el resto de la casa, siempre y cuando no haya otros animales. Hay gatos que necesitarán una semana y otros sólo uno o dos días. Lo sabremos cuando entremos en la habitación y veamos que el gato sale a recibirnos y está tranquilo. Ten cuidado con las ventanas, mantenlas cerradas, así como la puerta de la calle o jardín. El gato irá dejando sus feromonas en la habitación y poco a poco en el resto de la casa hasta que la considere en su totalidad su territorio.
Si hay otros animales
GATOS.
La primera regla que debemos conocer es: ¡nunca presentar a un gato otro gato o un perro libremente y de golpe! La presentación debe ser en un momento en el que los gatos estén tranquilos, no haya ruidos ni nada estresante. La primera presentación podemos hacerla metiendo al gato nuevo en un transportín dejándolo en la misma habitación y dejando entrar a nuestro gato en la habitación, sin obligarle, para que huela todo y vea al gato nuevo. El transportín sirve como medida de seguridad, ya que lo más normal en esta situación es que se produzcan bufidos, gruñidos e incluso que levanten la pata para pegarse.
También a veces ocurre que nuestro gato al estar enfadado, nos bufe a nosotros o nos arañe, debemos comprender que el gato está tenso en esta situación, ¡no es nada personal!
Si los gatos están más o menos tranquilos, podemos esperar así unos 15 minutos, dando premios a ambos gatos. SI uno de los gatos se estresa demasiado, debemos terminar la sesión.
Debemos comprender que los gatos son territoriales y que normalmente comienzan sus relaciones con otros animales a la defensiva.
Tras unos días haciendo estas sesiones, cuando veamos que ambos gatos están tranquilos, ya no gruñen ni se bufan, entonces podemos abrir la puerta del transportín y sin obligarle, permitir que el gato nuevo salga a explorar. En esta situación se puede producir alguna persecución, pero entonces intervenimos e intentamos distraer su atención.
Cuando los gatos ya estén juntos, todavía puede haber un período de persecución, bufidos, gruñidos, mucho más leves. Ponerles algo rico de comer una o dos veces al día y jugar con ambos gatos a la vez. Hemos conseguido que se toleren, ahora intentemos conseguir que sean amigos.
PERROS.
Lo más importante es la actitud del perro. Empecemos dándole un buen paseo al perro, así estará menos nervioso. La primera presentación podemos hacerla con el gato dentro del transportín. Lo normal es que el gato bufe y gruña. Empezaremos con el perro a distancia y lo acercaremos poco a poco sin forzar la situación. Si en esta primera sesión el gato está más o menos tranquilo, las siguientes sesiones podemos dejar que el gato esté libre y que tenga lugares altos donde subirse y sentirse más seguro. En todas las sesiones de presentación el perro debe ir atado y debemos premiarle siempre que esté tranquilo.
Es muy importante no dejar al perro y al gato juntos y solos durante los primeros meses, aunque ya se conozcan. Debemos tener paciencia, ya que tenemos muchos años por delante para que disfrutemos todos juntos.
Nuestra actitud: debemos tener seguridad y ser positivos, transmitiendo calma a los animales y proyectando energía positiva en la situación.
3. ELEMENTOS IMPRESCINDIBLES EN EL HOGAR
Zona de vida social y juego
Es donde el gato pasará la mayor parte del tiempo. Ten en cuenta que el gato hará vida donde estéis vosotros, por lo que su zona de vida social será la misma que la vuestra. Es aquí donde es efectivo poner un rascador bien alto y robusto que sustituya lo que sería para un gato en estado natural un árbol donde poder afilar sus uñas y subirse para vigilar. Aparte de esto, el gato necesita estirar y tonificar sus músculos, por eso si le pones un rascador demasiado pequeño y el gato es adulto, no podrá usarlo e irá a otro lugar.
También puedes habilitar para el gato diferentes alturas, poniendo estanterías o baldas vacías en la pared o dejándole algún espacio libre encima de un mueble. Si tienes perro en casa, puedes poner la comida del gato en alto en alguno de estos lugares, así como una manta para que se duerma. Los gatos apenas hacen vida en el suelo, prefieren estar en alto.
El lugar del sol, ¡imprescindible!
Los gatos necesitan tomar el sol a diario. Intenta encontrar el lugar donde de más tiempo el sol y coloca allí una camita o manta para el gato.
Zona de alimentación
El agua debe estar siempre disponible, limpia y fresca, cambiándola a diario.
Zona de eliminación
Debemos dejar una zona de la casa únicamente como lugar para que el gato haga sus necesidades, donde colocaremos la bandeja de arena. debe ser un lugar poco o nada transitado y lejos de ruidos. El tipo de bandeja adecuado es una bandeja muy grande y no muy alta, de fácil acceso para el gato. Sugiero comenzar con una arena sin perfume, lo más natural posible y sobretodo que no genere polvo que puede ser perjudicial para nuestro gato. Es cuestión de probar y encontrar lo que más le guste a nuestro gato.
La limpieza de la bandeja debe ser diaria, retirando las heces todos los días y cambiando la arena por completo una vez por semana o cada dos semanas, dependiendo de cuantos gatos la usen y del tipo de arena.
Si cambiamos el arenero de sitio, tenemos que enseñárselo al gato, simplemente llevándole hasta él o colocándole en la arena, así ya sabe dónde está y cuando la necesite irá a su lugar.
Cuidado con las ventanas y las salidas al exterior
Si vives en un piso, ten cuidado con las ventanas, los gatos son muy curiosos y suelen caerse.
4. ALIMENTACIÓN
Nuestros gatos de interior siguen siendo carnívoros puros y están preparados para auto-administrarse la comida. Los gatos prefieren comer poca cantidad y muchas veces al día. Busca una tienda especializada e infórmate en tu veterinario de confianza sobre cuál sería la alimentación más apropiada para tu gato, sobre todo si necesita una dieta especial.
5. HIGIENE
Los gatos tienen una herramienta muy útil para auto lavarse ellos mismos: la lengua. No necesitan que los bañemos ya que ellos se lavan a diario, sobre todo después de comer.
A no ser que el veterinario prescriba los baños con fines terapéuticos o que encontremos un gato lleno de grasa de coche, por ejemplo, no hay que bañar a los gatos.
Si es de pelo corto, puedes cepillarle una vez por semana para eliminar el pelo muerto y evitar así que se formen bolas de pelo. Si es de pelo largo, lo ideal sería 3-4 veces por semana. También puedes darles malta para ayudarles a digerir las bolas de pelo.
6. SALUD E IDENTIFICACIÓN
Sobre las vacunas y desparasitación, cada veterinario tiene un protocolo, así que mejor pregunta en tu veterinario de confianza. Las uñas del gato no hay que cuidarlas, el gato se encarga de afilárselas. Pero si queremos cortárselas, debemos saber que sólo hay que cortar las puntas de las uñas, con unas tijeras especiales, y a ser posible que lo haga el veterinario.
Posibles síntomas de una enfermedad que no hay que dejar pasar:
- El gato deja de comer o come menos.
- El pelo del gato está sucio o con caspa constantemente.
- Ha dejado de lavarse.
- Está deshidratado.
- Tiene diarrea o heces con sangre, con o sin moco.
- Tiene legañas.
- Tiene mocos y/o estornuda mucho.
- Ha dejado de saltar.
- Se lava compulsivamente una parte de su cuerpo.
- De repente se muestra agresivo si intentamos tocarle una zona en concreto.
- Ha dejado de venir a saludarnos cuando llegamos a casa.
- Orina fuera de su bandeja, en superficies horizontales.
- Al orinar, maúlla o abre mucho la boca, síntomas de dolor.
- Va mucho a orinar pero orina poca cantidad.
- Se vuelve torpe, camina pegado a la pared de casa, se cae.
- Tiene calva redondas, heridas en la piel o alopecia.
- Tiene las orejas caídas o heridas detrás de las orejas.
- Tiene dificultad para respirar o ataques de asma.
- No levanta el rabo ni lo mueve.
- Maúlla incesantemente cuando está solo.
- Vómitos constantes, babas.
- No realiza sus estiramientos diarios.
- Tercer párpado visible.
Microchip
Se aconseja siempre ponerlo. Aunque sean gatos de interior, un traslado al veterinario o cualquier viaje con el gato ya es salir de casa y puede ocurrir cualquier cosa durante ese trayecto y el gato puede perderse. Si va identificado hay muchas probabilidades de volver a encontrarle.
7. JUEGO
Jamás debemos jugar con nuestras manos, siempre debemos tener juguetes y no necesariamente comprados: pelotas de papel de aluminio, hojas de árboles secas, cajas de cartón con agujeros...
Los juguetes para gato deben ser sobre todo ligeros.
Un gato doméstico bien alimentado puede cazar presas y luego no comérselas, sino traérnoslas a nosotros, momento en el cual no debemos enfadarnos ya que es una preciosa ofrenda.
Juegos que generan problemas de comportamiento en el gato
Es contraproducente jugar con nuestras manos con el gato, ya que esto genera problemas más adelante en el gato cuando es adulto.
Cuando el gato pasa del mes a los dos meses de edad, pasa por una fase de aprendizaje muy importante: el autocontrol y la intensidad de la mordida. Esto lo suelen aprender mediante juegos con sus hermanos y su madre, por eso es ideal que el gatito viva con su familia hasta los dos meses y medio de edad o con otros gatos que le enseñen.
Si nos muerde, no debemos mover la mano y debemos chillar, demostrándole que nos está haciendo daño. Esto lo hacen sus hermanos gatitos cuando juegan entre ellos. Cuando nos suelte, debemos retirar la mano o el pie tranquilamente y desviar su atención a otro tipo de juego. Este chillido sólo lo debemos realizar cuando se trata de un juego, jamás si un gato nos está agrediendo por otro motivo.
Hay que respetar el espacio vital del gato y no agobiarle cuando no quiere ser acariciado o cogido en brazos.
8. CONSEJOS PARA MEJORAR LA RELACIÓN CON TU GATO
Si quieres tener una buena relación con tu gato, aprende cuáles son los momentos para jugar y caricias y cuáles son para dejarle tranquilo. Esto es lo primero que hay que enseñar a nuestros hijos para que su relación con los gatos sea pacífica y respetuosa.
Manipulación
Si has adoptado un gatito pequeño, es importante que practiques a manipularlo muy suavemente y sin agobiarlo, en momentos en que esté tranquilo. Los momentos de juego y nervios son para desgastar energía, si en ese momento intentamos cogerlo en brazos o manipularlo se sentirá oprimido y puede que le asustemos o salga corriendo.
Si al coger a tu gatito le haces daño, puedes originar que para él sea traumático y crezca con miedo a que lo cojan. Ten cuidado de no hacerle daño y ser muy respetuoso a la hora de manipularlo. Nos ayudara a que cuando toque llevarlo al veterinario para él sea menos estresante cuando le tengan que mirar los oídos, sacarle sangre de sus patitas, etc.
Cuando lo tengas en brazos y lo quieras soltar, llévalo hasta el suelo y déjalo ahí, en vez de soltarlo desde una distancia demasiado alta, se puede hacer daño y asustarse.
Momentos para caricias
Si empieza a mover la punta del rabo el rabo entero y echa las orejas hacia atrás, deja de acariciarlo en el momento y déjalo tranquilo. Cuando un gato da golpes en el suelo con el rabo, es que se siente incómodo.
El castigo es innecesario y contraproducente
Si nuestro gato presenta algún problema de comportamiento, lo más normal es que se encuentre mal o tenga demasiado estrés. En ningún caso el castigo resuelve un problema sino que siempre lo empeora.
Hay que comprender cuáles son los comportamientos naturales de los gatos para saber si realmente es un problema de comportamiento o es algo en lo que no podemos intervenir. Por ejemplo, no podemos castigar que nuestro gato se suba encima de las mesas o estanterías, que arañe el sofá o nos robe la comida, Todo esto son comportamientos naturales del gato y hay que comprenderlos y en según qué casos poner soluciones naturales para él.
Ya hablamos de que los gatos prefieren hacer vida en las alturas, por lo tanto ¿cómo vamos a hacer entender a un gato que no puede subirse a ninguna parte? Si el gato araña el sofá, probablemente es porque no tengamos un buen rascador o no esté en el lugar correcto.
Si aplicamos un castigo, crearemos en el gato miedo y frustración, en vez de comprensión y educación.
Gatos muy tímidos o asustadizos
Si tu gato tiene mucho miedo y permanece escondido, intenta sacarlo de esa situación "sobornándole": comida irresistible o juego, algo positivo que haga que salga por sí solo, no a la fuerza. No vayas hacia él de frente sino de lado o de espalda y por un lateral, agáchate o túmbate, pestañea despacio mientras le miras y evita mirarlo fijamente.
9. SOBRE EL EMBARAZO Y LA TOXOPLASMOSIS
Has adoptado un gato y quizás en un tiempo decidas tener un hijo, es entonces cuando oirás la palabra Toxoplasmosis constantemente, por parte de médicos y familia. Antes de que te metan miedo con historias falsas o exageradas, es preferible que tengas toda la información a modo preventivo.
¿Qué es la Toxoplasmosis?
Es una enfermedad infecciosa, originada por un protozoo parásito que se llama Toxoplasma gondii y cauda problemas graves sobretodo en el feto. Se transmite de animales a humanos y los gatos son el único huésped definitivo para este parásito. Estos parásitos se encuentran sobretodo en la tierra y la suelen transmitir los roedores o pájaros. Las personas que trabajan la tierra o jardines también pueden infectarse.
Si tu gato no caza ni come animales vivos, sino pienso o carne bien cocinada, no hay ningún problema. Y si lo hiciera, durante el embarazo habría que evitarlo.
Un gato infectado con el parásito lo incuba durante un período de entre 3 y 20 días y durante 1 mes lo excreta en las heces. Estas heces deben estar expuestas 24-48h para que sean infecciosas, cosa que no ocurre ya que limpiamos las heces de los gatos a diario. Además, para contagiarte necesitas tocar las heces con las manos y llevártelas a la boca. ¡Bastante improbable!
Resumiendo
-Gatos que comen pienso y viven en casa con nosotros no contraen ni contagian la Toxoplasmosis.
-Si aún tienes dudas, puedes hacerte el test de Toxoplasmosis. Si la has pasado, no la volverás a contraer. Al gato también se le pueden hacer las pruebas, e igualmente si la ha pasado, ya no volverá a tenerla ni te contagiará jamás.
-Procura limpiar el arenero con guantes y lavarte las manos después.
-Lo mejor que puedes hacer es no comer carne o cocinarla muy bien y lavar bien las verduras y todo lo que comas, sólo así evitarás la Toxoplasmosis.
-Hay mujeres que pasan la Toxoplasmosis durante el embarazo por haber comido verdura mal lavada o carne poco cocinada, embutidos, etc. pero si tiene gato en casa, todas las miradas y la culpa van para él, pero probablemente no haya tenido nada que ver.
-No abandones a tu mejor amigo y compañero por algo que jamás pasará. Si te llenan la cabeza de historias de miedo, sé inteligente e infórmate mejor y de primera mano.
Qué aportará el gato a tu embarazo
Los gatos son animales protectores del hogar y de nuestras energías. A los gatos les suele gustar dormirse sobre tu barriga cuando estás embarazada, mullirla y ronronear. Esto tanto para ti como para tu bebé es muy beneficioso.
Gatos y bebés son compatibles
Ser madre es una de las mayores responsabilidades de nuestra vida, no podemos ser madres con una irresponsabilidad tan grave como la de abandonar a un compañero que depende de nosotros. Para ser una madre responsable, has de serlo también con tus animales.
Además, los niños que se crían con animales son más sociables y felices.
Problemas de comportamiento del gato cuando nace el bebé
Este estrés normalmente es causado por el propio propietario del gato, consciente o inconscientemente. Por ejemplo, para el gato es muy importante su territorio y olor, si empezamos a cerrarle puertas puede ocasionar que tu gato se sienta estresado al no poder marcar con sus feromonas esa zona sin explorar.
Otro ejemplo, cambio de hábitos por nuestra parte. De jugar mucho con el gato, tener rutinas diarias con él, a olvidarnos por completo de él. Los gatos no tienen celos, ni envidia, ni odio (todo eso es humano), pero lo que nota es que sus rutinas se han roto y es un animal muy rutinario.
Llegar a casa con mi bebé, ¿cómo se lo presento al gato?
Se le pueden ir llevando al gato ropa o trapitos impregnados del olor del bebé para que lo vaya reconociendo. Hay que tener en cuenta algo muy importante, para el gato, un bebé humano no es igual que un humano adulto. Por eso quizás en alguna ocasión pueda tenerle miedo. Pero si actuamos con naturalidad y le restamos importancia, comprobaremos que poco a poco, el gato se interesa por este nuevo compañero.
10. SÍNTOMAS DE ESTRÉS O POSIBLES PROBLEMAS DE CONDUCTA
Has de tener en cuenta que el gato no tiene intención ni hace nada para perjudicarnos. Siempre que se presente un problema de comportamiento, piensa que es el gato el que tiene el problema y que necesita ayuda para resolverlo.
Por favor, no regañes ni castigues ningún comportamiento, aunque encuentres a tu gato orinando en un lugar donde no debe y sientas enfado. Intenta cambiar tu percepción y entiende que tiene un problema, no lo hace por fastidiar a nadie.
Por otro lado, si tu gato tiene comportamientos agresivos, hay que diferenciar la agresividad de los juegos descontrolados. Lo normal es que el gato no muerda fuerte ni agreda a nadie. Si lo hace, puede ser consecuencia de haber jugado con las manos con él muy bruscamente, haber sido un gato al que han castigado físicamente, un gato muy inseguro o estresado, miedo o situación traumática, incluso algún dolor físico o malestar.
¡Todos los problemas tienen solución! Con paciencia, comprensión, cariño y constancia conseguiremos solucionarlos. Ayuda a tu gato al igual que ayudarías a cualquiera de tus amigos.
Desde Terapia Felina os deseo una larga y maravillosa vida juntos, llena de anécdotas bonitas e inolvidables.
Si tienes cualquier duda o sugerencia sobre este manual, si necesitas ayuda con la adaptación de tu gato o asesoramiento sobre sus cuidados, o si quieres asistir a los cursos y talleres de Terapia Felina para mejorar tu conocimiento sobre los gatos, ponte en contacto:
Laura Trillo Carmona TERAPIA FELINA
laura@terapiafelina.com
652 92 78 30
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